Energía: el Gobierno no apaga la luz

Lunes, 7 de febrero de 2011

Mientras el Ejecutivo llama a los ciudadanos a ahorrar energía, en las oficinas públicas no hay orden de racionar. Aseguran que La Moneda podría ahorrar un 20% con un cambio de switch.

El apagón sufrido la madrugada del pasado jueves, y que afectó a nueve regiones del país, otra vez hizo aparecer el fantasma del racionamiento eléctrico. El biministro de Energía y Minería, Laurence Golborne, no tardó en alertar que "podemos tener problemas de suministro, por eso tenemos que prevenir la eventual escasez que se puede producir en los meses de junio o julio". La campaña "cambia tu switch", orientada a que la ciudadanía adquiera el hábito del ahorro, parecía tomar más sentido que nunca. 

Pero mientras los ciudadanos nos aprestamos a desenchufar los televisores o a acortar la duración de las duchas, ¿qué está haciendo el sector público? 

Consultados al respecto, en el Ministerio de Energía y en la Agencia Chilena de Eficiencia Energética se negaron a hacer declaraciones. Sin embargo, fuentes consultadas bajo reserva al interior de ambos organismos reconocieron a este medio que actualmente no hay operando ningún plan específico que busque disminuir el consumo en la Administración Pública. Aseguran que cualquier ahorro en las oficinas del Estado es más bien producto de iniciativas individuales. Advierten, eso sí, que existe un proyecto, pero que no es posible aún entregar detalles ni plazos de puesta en marcha. 

Algo que no deja de ser preocupante si se consideran las cifras que entrega la directora de la ONG Chile Sustentable, Sara Larraín. "Es urgente que este sector se sume al ahorro. Por ejemplo, el Palacio de la Moneda podría llegar a ahorrar hasta un 20% de su energía sólo con cambios de actitud y sin inversión", afirma la ambientalista.  

Y el gasto de la casa de Gobierno no es menor. Según un estudio realizado por la Fundación Chile,  durante el 2008, La Moneda llegó a desembolsar $290 millones por conceptos de electricidad y gas natural, correspondientes, a su vez, a 2.101 MWh/año, principalmente para mantener elementos de climatización. De hecho, tales cifras llevaron a encargar un estudio que permita alimentar los 160 equipos de aire acondicionado con energía geotérmica, el cual tenía previsto  estar implementado a fines de este año. 

El problema es que el Palacio es sólo uno de los cientos de edificios públicos repartidos por el país y que suman  cerca del 1% del consumo nacional. 

Si bien, para el ex ministro del ramo, Marcelo Tokman, se trata de un porcentaje marginal, una campaña asociada a una mayor eficiencia energética por parte de las instalaciones gubernamentales serviría, asegura, como “un ejemplo para la ciudadanía”. “Debemos crear una cultura de la eficiencia, no sólo en lo energético, sino en todos los recursos”, explica.  

Y ya hay antecedentes sobre el tema. No sólo en el extranjero donde hay gobiernos que han dado orden de cambiar el parque automotor público por vehículos de bajo consumo o priorizar en los edificios las fuentes de energía alternativas, sino también en Chile. De hecho, en febrero de 2008, el Ministerio del Interior, mediante la circular Nº10, llegó a entregar  instrucciones precisas para la aplicación de medidas en cada repartición pública. 

Esa iniciativa empujó a que se sumaran, en su día, gremios como la Confederación de la Producción y el Comercio, (CPC) que envió un  protocolo a sus asociados en el que se solicitaba imitar la iniciativa oficialista apagando fachadas de edificios, carteles y vitrinas, entre otras medidas.

eldinamo.cl/noticia